- El Negocio del Deporte
- Posts
- ¿El golf es el deporte del futuro?
¿El golf es el deporte del futuro?
El Negocio del Deporte
Si hay un deporte que dio que hablar en 2023 en el plano profesional, ese fue el golf. Entre la disputa del PGA Tour con LIV Golf, su posterior decisión de unificarse (aún no concretada) y la nueva liga que lanzaron Tiger Woods y Rory Mcilroy, hubo un montón de tela para cortar. Hoy quiero hablar de golf, pero no de las competencias profesionales, sino del golf como actividad deportiva. Otro mundo.
Si hablamos del negocio de un deporte a nivel profesional, la métrica clave es cuánta gente lo mira. Si hablamos del negocio de un deporte como actividad, la métrica clave es cuánta gente lo practica. Parece lo mismo, pero no lo es. Estamos de acuerdo en que si más gente mira un deporte es probable que luego lo practique y viceversa, pero hay deportes que son más lindos para mirar y otros que son más lindos para practicar.
A su vez, si hablamos de la competencia profesional, las compañías a analizar tienden a ser las ligas, los clubes o franquicias y las compañías de medios. Ahora, si nos interesa el negocio de un deporte como práctica, lo que tenemos que mirar son las compañías que venden los productos. Y sobre ellas quiero contarles hoy.
El golf como actividad cuenta con dos problemas que limitan considerablemente la cantidad de gente lo practica: los requerimientos tanto económicos como de tiempo necesarios para llevarlo a cabo. Esto hace que en general, lo jueguen personas grandes de buen pasar económico. La mediana de edad de alguien que practica golf en los Estados Unidos es de 54 años.
Compañías como Acushnet y Callaway han sabido construir imperios vendiendo productos a esa población practicante. Acushnet, por ejemplo, a través de marcas como Titleist y FootJoy facturó 2.110 millones de dólares en 2022. De los cuales 678 millones vinieron únicamente por la venta de pelotas.
Para que tengan contexto del número, ese mismo año el Manchester United facturó 704 millones de dólares, un 33% de todo lo que facturó Acushnet y apenas 26 millones más de lo que generó únicamente vendiendo pelotas de golf.
Ahora bien, como siempre decimos en nuestro ciclo permanente Invertir en Deportes, y que explicaremos desde cero en un curso nuevo que les voy a comentar en unos días, lo que importa es el futuro. El valor de Acushnet, Callaway y cualquier compañía, reside en lo que pueda generar en los próximos años, no en lo que hizo hasta ahora.
Entonces, una de las preguntas que tenemos que hacernos para entender el valor de estas empresas es hacia donde irá el deporte como práctica en los próximos años.
En ese sentido, para que más personas jueguen al golf pueden pasar dos cosas: o que comience a llegar a un segmento nuevo de la población, o que aumente la cantidad de personas que pertenecen al segmento que lo practica. Asumiendo, claro está, que no cambian sus preferencias hacia otro deporte.
Lo interesante es que están ocurriendo ambas. Por un lado, irrumpió el formato Topgolf. Me refiero a estos complejos de entretenimiento compuestos de un montón de bahías de tiro anexados a restaurantes y bares. El fenómeno explotó en los Estados Unidos y la principal empresa, justamente Topgolf, hoy tiene unos 92 complejos.
Según esta compañía, el público que concurre es más joven, con más mujeres y mayor porcentaje de personas no blancas. Esencialmente, un público distinto al que juega habitualmente al golf. Y este formato explica la mayor parte del crecimiento del golf en los últimos años.
Aunque, lo que creo es menos visible pero podría ser relevante en el largo plazo, es pensar en la segunda variable: si puede aumentar la cantidad de personas que pertenecen al grupo que habitualmente juega al golf.
En el Instituto Baikal conversamos seguido acerca del impacto que podría tener el cambio demográfico en el comportamiento de los consumidores. Y es interesante porque se trata de un cambio lento pero súper predecible. Esencialmente, la población mundial está envejeciendo. El aumento en la esperanza de vida sana, sumado a la caída en la tasa de natalidad, hizo que se dispare el porcentaje de gente de más de 65 años. Estados Unidos pasará de tener el 13% de su población en ese rango de edad en la década del 2010, a un 22% en 2050.
Entonces, si la gente que juega al golf es aquella con disponibilidad de tiempo y recursos económicos, y estamos yendo hacia una situación poblacional donde cada vez más personas tendrán esas dos cualidades, la pregunta es: ¿podría aumentar la cantidad de gente que juega al golf?
Hay cosas más estimables que otras. Sí podemos estar bastante seguros de que el cambio demográfico se concretará. Pero no podemos saber a ciencia cierta qué haran esas personas. El pickleball, por ejemplo, está emergiendo entre los adultos mayores. Al igual que el pádel en otras regiones del mundo. Si hay algo que es seguro, es que los deportes como actividad tendrán que ir adaptándose para satisfacer a una población cada vez más envejecida. Aquellos que lo logren, muy probablemente tendrán un gran impacto económico por delante.
Hasta la próxima.
Santiago.
Reply